Piedra, Papel o Tijera por Catalina Lombardi (Junio 2024)
diseño: Elizabet Sicilia., Coordinación General : Elizabeth Sicilia, Texto: Catalina Lombardi, Fotografías: Reiny Ponce
"Lisonja
Divina": Teatro desde las disidencias.
Catalina Lombardi (Colombia)
El teatro ha sido una
herramienta fundamental para las personas y las sociedades ya que su dinámica
individual o colectiva invita a la reflexión cuestionando y analizando las
diversas realidades sociales motivando a la acción y al cambio. Una de las características
fundamentales del teatro latinoamericano es que esta diciplina artística ha
sido un medio fundamental para visibilizar la diversidad cultural y abordar
problemáticas sociales y políticas.
Esta característica del teatro
en América latina nace de un hecho en particular y es la importante influencia
de El Teatro del Oprimido. Esta tendencia teatral fue sistematizada por el
dramaturgo, actor, director y pedagogo teatral brasileño Augusto Boal a partir
de 1960. Basándose en ideas de Paul Fraire y Bertolt Brecht, creo el Teatro del
oprimido que busca analizar y reflejar las realidades y diversas injusticias
sociales de forma critica.
Al hacer esta referencia mi
intención no es colocar al teatro en América latina dentro una sola tendencia,
sin embargo, no podemos negar su influencia en nuestras producciones artísticas
especialmente aquellas que pretendan mostrar realidades diversas y únicas que
corresponden a los contextos específicos de cada país. El teatro en nuestros
países ha reflejado por muchos años los cambios sociales y políticos, las
luchas, las búsquedas humanas y las realidades en la región que se escapan de
las estructuras culturales de dominio y sus mensajes que obedecen a intereses
políticos y económicos.
Los escenarios son espacios de
libertad y creación. En este articulo pretendo enfocarme en la creación teatral
desde las disidencias sexuales. Es una representación artística que explora y
celebra la diversidad de identidades y expresiones de género que refleja la
sociedad y sus cambios a través de la voz única de su comunidad que en si misma
es una realidad dolorosa llena de invicibilización, opresión e injusticia.
El teatro desde las
disidencias es un movimiento cultural y un vehículo transformador. Es una forma
de activismo que utiliza una pieza teatral para provocar reflexión y diálogo
sobre la diversidad sexual y el género. Las obras teatrales desde las
disidencias transforman la vergüenza y el estigma en orgullo y resistencia
desafiando con creatividad y belleza la discriminación y la violencia. Además,
es subversivo porque desafía las estructuras de poder y las normas sociales,
utilizando la creatividad para promover la aceptación y la igualdad. Es una
forma de arte que no solo representa, sino que activamente participa en la
lucha por los derechos y la visibilidad de la comunidad LGBT+.
Un ejemplo claro de esta
búsqueda a través del teatro es la obra teatral "Lisonja Divina". Ópera prima de Ana Rivera, mujer
artista feminista y lesbiana. Ana a través de la dramaturgia explora la doble
moral religiosa ante la comunidad LGBT+. Utilizando la historia de Samuel
quien habiendo sido elegido líder en una organización religiosa ha decidido ser
un buen líder, mintiéndose, hasta que una serie de sucesos inesperados lo
llevan a cuestionar su libertad para romper un silencio intocable.
Ana
accedió a contestar algunas preguntas sobre su proceso de análisis para la
creación de esta dramaturgia.
Catalina
Lombardi: ¿Cómo espera que esta obra contribuya al
diálogo sobre la inclusión y la diversidad sexual dentro de comunidades
religiosas conservadoras?
Ana Rivera: Espero que el hecho de hacer visible la hipocresía, de muchos líderes que dirigen estás comunidades religiosas conservadoras, esa hipocresía con la que se nos juzga a las personas de las disidencias sexuales, permita el cuestionamiento, el análisis y la sensibilización para que haya un reconocimiento de nuestros derechos, dentro y fuera de estas organizaciones; también es una oportunidad de nombrar injusticias y violaciones de derechos que se cometen en nombre de Dios para abrir espacios de discusión desde puntos de vista teológicos liberadores, porque a mí parecer no cuadra eso de buscar la salvación oprimiendo a la prójima, al prójimo o al prójime; además que hay que analizar nuevas formas de creer en una divinidad lejos de lo construido por el patriarcado.
Catalina Lombardi: ¿Cuáles fueron los mayores desafíos al representar la interacción entre la fe mormona y la identidad LGBT+ en el escenario?
Ana Rivera: El
lenguaje, ésta fe mormona es sutil al hablar de las identidades diversas,
públicamente su discurso va en pro de la familia, en pro del matrimonio eterno
entre hombres y mujer para conservar la descendencia así como en los tiempos de
Abraham, y tiene sus propios códigos (vestimenta, escrituras, música) yo me
cuestiones como hacer para que la gente que nunca ha asistido a una iglesia
mormona sepa de que va la obra, y pues pensé en el vestuario que es tan
peculiar, y también la forma secreta en que se dan estos encuentros entre las
personas diversas que frecuentan en esta fe, pensé en mi propia experiencia,
por qué no es que dejemos de ser, solo buscamos los espacios, quise jugar con
eso, con lo secreto, en esas oficinas a puerta cerrada.
Catalina
Lombardi: ¿Qué aspectos de los personajes cree que
resonarán más fuertemente con el público, independientemente de su orientación
sexual o creencias religiosas?
Ana Rivera: El acoso sexual, el abuso por parte de los esposos a las esposas, las violaciones a jovencitas, la sutileza con la que los líderes manipulan en nombre del amor a Dios, la hipocresía, el cinismo de juzgar a otra, otra u otro, la doble moral.
Catalina
Lombardi: ¿Qué mensaje central espera que los espectadores
se lleven después de ver la obra?
Ana Rivera: Que la religión además de estar fundamentada en el patriarcado está llena de hipocresía partiendo desde sus liderazgos que en su mayoría están representados por hombres.
Catalina
Lombardi: ¿Cómo cree que el teatro puede ser una plataforma
efectiva para el cambio social, especialmente en temas de género y sexualidad?
Ana Rivera: Desde que es un espacio para jugar, se convierte en un medio para sanar y construir cosas nuevas desde la colectividad, claro esto depende de los ideales u objetivos de cada individua o individuo que hace teatro y para el público el teatro se convierte en un espejo, donde cada unx se ve reflejado, esto genera diálogos internos y con el entorno, tan bien cuestiona, y puede informar, cuenta historias para no olvidar nombra las cosas que se censuran en los espacios conservadores, se vuelve una herramienta para compartir temáticas desde lo lúdico, lo absurdo pero con seriedad.
La obra "Lisonja Divina" fue gestada en el proceso de formación en dramaturgia Didascalia con el acompañamiento de la maestra Jorgelina Cerritos y Los Del Quinto Piso. Además, cuenta con la dirección de Diana Bonilla, actriz, docente de teatro y literatura. Esta obra se presentará el próximo 28 de junio, a las 7:00PM, en la Parroquia Iglesia Anglicana San Juan evangelista ubicada en 63 av. Sur y Av. Olímpica, San Salvador.
A manera de conclusión el arte
es y será una herramienta valiosa para la humanidad, sus procesos, su búsqueda
y su reivindicación. El ser parte activa como publico en las obras teatrales es
importante ya ponen en escena temas de vital importancia para nuestra sociedad
y sus procesos. Los prejuicios son también el resultado de paradigmas sociales
y nuestra búsqueda debe ser siempre la conciencia sobre nuestros entornos y sus
diversas realidades. El arte salvadoreño es diverso, honesto y de enorme
calidad. Es un aspecto fundamental de la cultura. Así como también será siempre
una herramienta invaluable de lucha y resistencia.
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